A solas
Por Giselle Lucía Navarro Delgado
(La Habana, Cuba)
Callad.
La soledad es la hoguera
donde se apacigua todo sufrimiento.
Callad, mujer, y no dejes de orar,
son tu túnica y plegaria
el único disfraz para el ultraje.
Ha comenzado el ciclo del silencio.
Muérdete los labios,
cose tu grito a la garganta
y extermina tus lágrimas.
Pronto llegarán
los heraldos del viejo crimen
y debes esconderte.
Tu sangre corre el riesgo
de amanecer desnuda.
lindo poema. Me conmovio
Gracias por escribirlo.
muchas gracias por tu comentario. Me alegro mucho. Saludos